Finalizado el plazo para la trasposición de la Directiva europea que obliga a controlar el gas Radón
La Fundación para la Salud Geoambiental denuncia la dejadez de la Administración española al permitir que se agote dicho plazo sin presentar siquiera un borrador
A pesar de las advertencias de las instituciones europeas, España ha acabado por no hacer sus deberes a tiempo. La Fundación para la Salud Geoambiental, organización sin ánimo de lucro que lleva años trabajando para concienciar sobre las consecuencias del gas Radón para la salud de los ciudadanos, ha lamentado la pasividad del Gobierno ante un problema que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), constituye la segunda causa de cáncer de pulmón en el mundo, sólo por detrás del tabaco. “Es terrible que ningún Gobierno, sea del color que sea, haya tenido ni el más mínimo interés en la salud de los ciudadanos; tan sólo les ha preocupado el Radón como arma arrojadiza contra el Gobierno de turno”, asegura José Miguel Rodríguez, director de la Fundación.
Recuerdan que el derecho a la salud está recogido en la Constitución, y que compete a los poderes públicos organizar y tutelar la salud pública a través de medidas preventivas. “El Plan Nacional de Radón y el Código Técnico de la Edificación (CTE) con medidas antirradón para la construcción no pueden demorarse más, y deberían estar operativos antes del verano”. El plazo para trasponer a la legislación española la Directiva europea 2013/59/EURATOM, que obliga a los países miembros a medir y controlar el gas Radón en hogares y oficinas, venció el pasado 6 de febrero.
La preocupación por la falta de actuación de las autoridades competentes no es, sin embargo, el único foco de reflexión para esta organización: de hecho, dicen, la irrelevancia social de un tema tan delicado como éste provoca estupor: “la gente no sabe qué es el Radón, cómo puede aparecer en tu casa, y qué supone eso”.
La Fundación para la Salud Geoambiental lleva años realizando tareas de divulgación sobre este asunto. El programa Vive sin Radón (www.vivesinradon.org) nació hace dos años para aportar soluciones y una información clara a los ciudadanos sobre este gas natural que emana del subsuelo. Desde la entidad recomiendan hacer una evaluación en el caso de que la vivienda se encuentre en una zona con elevado riesgo de presencia de este gas, y, en función del nivel de Radón detectado, aplicar medidas de ventilación de la casa o, por ejemplo, realizar una obra que garantice un sistema de ventilación para expulsar el gas radioactivo de los interiores del inmueble.