El ahorro de agua en España, una necesidad urgente
España ocupa un puesto de la lista de los 33 países que se quedarán sin agua en el año 2040, según un estudio del World Resources Institute (WRI). Ahorrar agua pasa a ser una prioridad y debemos concienciarnos de su importancia, por eso daremos algunos consejos prácticos que pueden servir en el día a día
España podría quedarse sin agua potable en tan solo 20 años. Así lo demuestra en un estudio la organización World Resources Institute, que crea una lista de 33 países que sufrirán esta escasez en el año 2040, en la que España ocupa el puesto 32 del ranking (de 167 países).
Actualmente, más de mil millones de personas viven en regiones con escasez de agua y hasta 3.500 millones podrían experimentar insuficiencia de agua para 2025, según los últimos datos de WRI. Este derroche unido al aumento de la contaminación, a la ruptura de ecosistemas acuáticos, al cambio climático y las sequías hará que el agua “dulce” sea en un futuro un bien natural de lujo.
Estrés hídrico en España
De hecho, esta misma organización (WRI) ha denunciado que “el uso doméstico de agua ha aumentado un 600% durante los últimos 50 años”. Una cuarta parte del mundo se enfrenta ahora a un estrés hídrico extremadamente alto, donde más del 80% del suministro disponible se extrae cada año para uso doméstico, industrial y para la agricultura.
Pero, ¿qué es exactamente el estrés hídrico y cómo se mide? El estrés hídrico mide las extracciones totales anuales de agua (municipales, industriales y agrícolas) expresadas como porcentaje del total anual de agua azul (dulce) disponible. Los valores más altos indican un estrés alto. En un baremo de 1 a 5 puntos, se mediría de la siguiente forma:
- 0-1 puntos: Bajo (<10% uso de los recursos hídricos)
- 1-2 puntos: Bajo a medio (10-20% uso de los recursos hídricos)
- 2-3 puntos: Medio a alto (20-40% uso de los recursos hídricos)
- 3-4 puntos: Alto (40-80% uso de los recursos hídricos)
- 4-5 puntos: Extremadamente alto (>80% uso de los recursos hídricos)
En este sentido, España en el 2020 ocuparía el puesto 30 de la lista del World Resources Institute. En total sufre un estrés hídrico de 3,77; es decir, alto. Por sectores, tanto el industrial, como doméstico y el agrícola padecen una tasa alta (3,42; 3,42 y 3,93, respectivamente). En 10 años, las previsiones hablan de un descenso en la lista, que situaría a los españoles en el puesto 31, con un rango total alto de casi 4 puntos (3,93). Y en 2040, podríamos bajar hasta el lugar 33 con un estrés hídrico de más del 4% (4,05 extremadamente alto, más del 80% de los recursos hídricos usados).
“La situación del agua en España es muy seria, catastrófica. Aunque parezca que hay agua porque los embalses están llenos, la media de los últimos años muestra claramente que cada año tienen una media de recogida de agua menor. De hecho, nosotros trabajamos en zonas de humedales de la zona de La Mancha y llevamos cuatro años viendo cómo humedales que jamás se secaban están completamente secos ahora. Por una parte, vemos que hay menos recogida de agua de lluvia y más evaporación, porque hoy hace más calor y hay más periodos secos. Y, además, la extracción de agua de los acuíferos, hace que los humedales se sequen”, explica a la revista el director gerente de la Fundación Global Nature, Eduardo de Miguel.
Además, sus previsiones vaticinan que no va a ir mejor la cosa, “porque, evidentemente, no hay una disminución significativa en el consumo de agua”. Y asegura que, para que la situación mejore, lo que debemos reducir es el consumo de agua de regadío. “Hay que tener en cuenta que más del 70% del agua en España va para regadío y que las previsiones de lluvia para las próximas décadas dicen que la reducción de lluvias oscilarán entre el 10 y el 20%, con lo cual tenemos un problema muy serio a medio plazo”, asevera.
¿Cuál será la gota que colme el vaso?
“La gota que colma el vaso”, así se ha llamado la última campaña sobre ahorro de agua que puso en marcha el pasado mes de julio el Ayuntamiento de Madrid, de la mano de la agencia de publicidad September. “Cuando el Ayuntamiento compartió con nosotros el brief sobre la campaña nos dimos cuenta de que nos enfrentábamos a un doble reto: el propio que pedía el encargo, concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de ahorrar agua, y otro extra, intentar comunicarlo de una forma que ninguna otra institución lo hubiera hecho antes”, explica a mi herbolario el responsable creativo de la agencia, Víctor González Pozo.
La idea creativa se basaba en un pensamiento: predicar con el ejemplo. “Como institución no podíamos ser agentes pasivos de este proceso y solo exigir a los madrileños que ahorraran agua. Así que calculamos el enorme gasto de agua que trae consigo una campaña publicitaria y llevamos "La gota que colma el vaso" a nuestro propio terreno. Por eso, les propusimos reutilizar antigua cartelería de otras campañas del Ayuntamiento y apostamos por los soportes digitales y de esta manera conseguimos ser la primera campaña de ahorro de agua que verdaderamente ahorraba agua”, explica el director creativo.
Por otro lado, el pasado 14 de julio se celebró en Madrid el XII Foro de la Economía del Agua, una iniciativa de la Universidad de Alcalá en la que se organizan espacios de reflexión y diálogo sobre el ciclo urbano del agua en España. En esta ocasión, se puso de relieve el problema actual del agua que “radica en la incapacidad de gestionar correctamente las aguas residuales”, señalan.
Consejos para ahorrar agua
Regadíos. “Podemos ahorrar agua a nivel doméstico y a nivel industrial. Creo que el ciudadano medio está concienciado a la hora de la utilización del agua, aunque queda mucho por hacer, pero si no se ahorra en los regadíos, realmente el efecto del esfuerzo, del ahorro del ciudadano medio va a ser mínimo. España es el país de Europa que más porcentaje de su agua dedica a riego. Entonces, o hacemos esfuerzos significativos en el ahorro de agua destinada a regadío o no vamos a ver un efecto claro en el ahorro de agua del ciudadano medio”, sentencia Eduardo de Miguel.
En casa. Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, el consumo de agua en España por persona y día es de 265 litros. En viviendas sin jardín, los tres usos principales tienen lugar en el cuarto de baño. La ducha o el baño suponen un tercio del consumo (34%); el inodoro supone el 21%; y el gasto de agua en el lavabo representa el 18%. Según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica, en el baño consumimos casi las tres cuartas partes del agua total que consumimos en nuestras casas. Desde la Fundación Aquae, proponen algunas ideas para hacer un uso más eficiente: “Ducharse en vez de darse un baño; usar un rociador de ducha de bajo consumo, reducir el tiempo de ducha, utilizar perlizadores, es una solución barata y súper ecológica y utilizar grifos monomando mejorados, ya que facilitan un consumo doméstico más eficiente”, afirman. Además, existen otras rutinas que se pueden seguir como por ejemplo, cerrar el grifo cuando no se use o utilizar un vaso para enjuagarse los dientes (tener el grifo abierto gasta de 5 a 15 litros por minuto). En cuanto a la lavadora y el lavavajillas, utilizarlos solo cuando estén llenos.
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