"Hacia un paciente proactivo que participe de su proceso de mejora o curación", dra. María Pérez
En el marco de la jornada mundial del enfermo, la SESMI defiende un paciente proactivo que participe de su proceso de mejora o curación.
Como explica María Pérez, doctora en medicina global integrativa y miembro de la junta de la SESMI, los profesionales integrativos no decidimos por el paciente, le aconsejamos y acompañamos en su proceso personal de transformación para lograr el equilibrio en salud y bienestar.
La medicina integrativa “acoge al paciente de manera global, trabajando no sólo su cuerpo físico sino también energético, mental y emocional”, destaca la doctora Pérez. “Valoramos no sólo los síntomas sino también su historia clínica y vital”, añade y, en concreto, aspectos como los primeros momentos de vida del paciente (gestación, momento de la fecundación, embarazo y parto), operaciones, fármacos, funcionamiento de su sistema digestivo, renal, pulmonar y cardíaco (…), así como, sus hábitos de alimentación o de relación con el entorno, intereses, intenciones y propósitos.
La medicina integrativa suma a la medicina convencional otras técnicas seguras y eficaces, siguiendo el principio de prevención, e integra los órganos del cuerpo en una unidad funcional, incluyendo la mente y el entorno del paciente. Los médicos integrativos hacen especial hincapié en las modificaciones de los hábitos de vida, cuidado de la alimentación, ejercicio adecuado, estilo de vida y bienestar y en la prevención ya que, como explica la doctora Pérez, en función de cómo el paciente metabolice los alimentos, la vida o la epigenética que tenga, puede poner en marcha o no una serie de tendencias patológicas.